Capitulo 12

Nevin estaba al otro lado del lago, entrenando con el arco. Mande a Guille, que estaba entrenando conmigo con la espada. Sostenia a Adalila y la deje delicadamente en el suelo. Estaba bastante palida, respiraba pesadamente y tenia bastante fiebre. Quien sabe por lo que habia pasado .Pero en ese momento estaba feliz, aunque queria que se pusiera bien a toda costa. Entonces sucedio algo que no me esperaba. Mi rubí comenzo a brillar hasta cegarnos a mis a migos y a mi, que estabamos alrededor de Adalila. Cuando el brillo desparaecio, Adalila comenzo a respirar mejor y su temperatura bajo un poco. Las heridas mas pequeñas se sanaron, aunque los moratones no desparecieron.Entonces llega Nevin. Primero se queda sorprendido, como si no se lo puediera creer. Luego Adalila abre levemente los ojos, a juzgar por sus ojeras no habra dormido en dias, y extiende los brazos, como para abrazar a su hermano. Nevin la abraza y parpadea paracontener las lagrimas.
La llevamos entre los dos hasta su cabaña y alli la cuidamos un poco. Despues de un rato, Adalila se despierta. Nevin me manda a que diga a los ciudadanos que lo mejor seria empezar una busqueda, por si alguioen mas a escapado. Yo asiento y me voy, por que se que lo unico que quiere es estar un rato con su hermanita.
Fui a avisar a los demas y a organizar un grupo de busqueda. Cuando estuvo terminado y no tenia nada que hacer, pense en ir a Nevin, pero ultimamente estaba demasiado lejos de mis amigas y el querria estar un rato con su hermana, asi que fui a ver a Miriam y Veronica. Charlamos un rato, principalmente de por que y como es que estabamos en ese mundo, de lo que habia pasado con Adalila y de lo que (principalemte intentaban hablar ellas) pasaba conmigo y con Nevin. Al final les conte alguna que otra cosa suelta. Vale, sí, esta bien, se lo conte todo con pelos y señales. ¿A quien quiero engañar? Son mis mejores amigas, no les puedo dejar con la intriga. Ademas ellas me lo cuentan todo, ¿por que yo no? Obviamente no les dije donde estaba el lago, pero despues de eso, todo.
Despues decidi dirigirme hacia la cabaña de Nevin. Atardecia. Seguramente no dormiria para poder cuidar a Adalola, asi que le propondia hacer turnos. En el horizonte vi un punto negro que se hacia mas y mas grande. Un pajaro. Parecia un gran pajaro negro, como una mezcla de cuervo y halcon. Me escondi y empece a observarlo. A cada segundo que pasaba lo veia mejor. Cuando ya estaba muy cerca del poblado, una mano me tapo la boca y recibi un golpe en la cabeza. Luego, como cuando llegamos a la Tierra de Nadie, solo vi oscuridad.
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Cuando desperte, estaba en un calabozo. O al menos lo parecia. Las paredes eran de piedra, todo era de piedra. Solo habia una rendijita por la que entraba un haz de luz. Hacia frio, mucho frio. Cuando mi vista se fue acostumbrando, distingui manchas en aquellas paredes grises. Manchas de sangre. Y cadenas. Habia cadenas, seis para ser mas exactos, una por pared y lo que me sorprendio fue que habia una en el techo y otra en el suelo. Seguramente era una sala de tortura. Por alguna razon, yo no estaba encadenada. Solo amordaza. No podia hablar, tenia las manos atadas detras de la espalda y los pies tambien atados. Ademas tenia un dolor enorme en la cabeza, donde me habian golpeado.
Sabia donde estaba. Estaba en los calabozos del sacerdote. Seguro. Ahora entendia todo. No habian dejado escapar a Adalila asi por que si. Un trueque (seguramente pedido por Bruno). Me habian cogido a mi en su lugar.






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